Había una jícara que se convertía en pájara, pero muy típica pícara.
Había una jícara que se convertía en pájara, pero muy típica pícara.
Había una jícara que se convertía en pájara, pero muy típica pícara.
Tras tres tigres tristes rastrean treinta y tres rastreadores.
Cuando digo «digo» digo «Diego». Cuando digo «Diego» digo «digo».