En un jardín zoológico se murió un elefante. Uno de los cuidadores lo lloraba desconsoladamente. Un visitante que pasaba por allí le preguntó a otro cuidador:
- ¿Lo quería mucho, verdad?
- No-respondió el cuidador- lo que pasa es que por sorteo le ha tocado a él cavar la fosa.
En un jardín zoológico se murió un elefante. Uno de los cuidadores lo lloraba desconsoladamente. Un visitante que pasaba por allí le preguntó a otro cuidador:
- ¿Lo quería mucho, verdad?
- No-respondió el cuidador- lo que pasa es que por sorteo le ha tocado a él cavar la fosa.
- ¿Lo quería mucho, verdad?
- No-respondió el cuidador- lo que pasa es que por sorteo le ha tocado a él cavar la fosa.