Alguien dijo: no jueguen con fuego ... y Fuego quedó sin amigos.
Alguien dijo: no jueguen con fuego
... y Fuego quedó sin amigos.
Alguien dijo: no jueguen con fuego ... y Fuego quedó sin amigos.
La esposa le dice a su marido: – Cariño, ¿tengo la nariz grande? – Cariño, tu la tienes común. – Ah, si? – Si, «común» tucán. 34