- ¡Riiín! - Suena el teléfono. - Dígame - dice uno, - ¡Mé! - dice el otro.
- ¡Riiín! - Suena el teléfono.
- Dígame - dice uno,
- ¡Mé! - dice el otro.
- ¡Riiín! - Suena el teléfono. - Dígame - dice uno, - ¡Mé! - dice el otro.
Si contamos cuántos se apellidan «Díaz», sabremos cuándo se acaba el mundo. – ¿Por qué? – Porque tendremos los Díaz contados 17
Había dos tomates cruzando la carretera, un tomate le dice al otro:– Ten cuidado no vaya a ser que…– ¡Plof!. 36